Por Monserrat Californias
El líder supremo de Irán, Ali Jameneí, afirmó en un mensaje televisado que su país jamás cederá ante las presiones de Israel, rechazando rotundamente cualquier idea de “rendición incondicional”. Durante su discurso, subrayó que la historia y la dignidad del pueblo iraní impiden aceptar ultimátums externos.
Aseguró que la confrontación con Israel y las amenazas estadounidenses solo fortalecerán la voluntad nacional. Jameneí reiteró que los iraníes resistirán tanto guerras impuestas como “paz coaccionada”. El líder cerró su intervención con un desafío claro: Irán no se rendirá jamás.
Centró parte de su advertencia en Estados Unidos, al sostener que una intervención militar estadounidense desencadenaría daños irreparables. Según alertó, cualquier ataque directo provocaría consecuencias catastróficas en la región y a nivel global. Además, calificó de “insinceras” las amenazas de Washington y advirtió que la intervención militar no intimidará a Irán.
Su mensaje busca disuadir a funcionarios estadounidenses evaluando opciones militares tras la escalada con Israel e hizo un llamado a los líderes mundiales a entender que provocar a Irán “sería un error irreparable”.
El contexto inmediato de su discurso es la confrontación abierta con Israel, iniciada el 13 de junio con bombardeos de ese país sobre sitios iraníes. En respuesta, Irán lanzó misiles y drones contra territorio israelí, marcando una escalada significativa. Jameneí afirmó que Israel “no saldrá indemne” y enfrentará un “destino amargo y doloroso”.
De acuerdo con prensa iraní, autoridades de la Guardia Revolucionaria advierten que el conflicto podría ampliarse, incluyendo bases estadounidenses en la región. Este intercambio militar ha elevado considerablemente el riesgo de un conflicto regional más amplio.
Entre tanto, EU intensificó movimientos en la zona: desplegó aviones de combate y evalúa posibles intervenciones directas. El propio expresidente Trump declaraba tener control del espacio aéreo iraní y aseguraba conocer la ubicación de Jameneí.
